El combustible bioetanol utilizado por las chimeneas se quema de forma limpia sin producir cenizas ni residuos. El bioetanol es un alcohol producido por la biomasa que se utiliza como combustible y tiene una combustión limpia. El alcohol se produce a partir de un almidón de azúcar que normalmente se obtiene como extracto de plantas 'comestibles' o se genera a partir de residuos vegetales o paja. Mediante un proceso de fermentación, el almidón se extrae de la biomasa y se convierte en bioetanol. Los biocombustibles son alternativas respetuosas con el medio ambiente a los combustibles fósiles tradicionales que provocan gases de efecto invernadero, ya que las plantas convierten el oxígeno en la atmósfera, el biocombustible es una fuente de energía sostenible y renovable y, al ser neutra en cuanto al CO2, supone una gran contribución a un medio ambiente más limpio.
Es muy importante usar un bioetanol con la mayor pureza posible. Recomendamos que tenga como mínimo un 95% de pureza. Algunos bioetanol que podemos encontrar en supermercados están diluidos con agua para mantener los precios bajos. Al quemar el combustible podría provocar la aparición de humo y olor e incluso dañar su chimenea.